viernes, 12 de agosto de 2011


Díganle, que muero por sus besos, cuéntenle, que espero su regreso, que su amor es un fuego encendido, que no puedo apagar dentro mío. Quiero quitarme ese amor de la cabeza, y este tonto corazón no me lo deja, me dice como él no hay otro, me llena de recuerdos locos,